
El místico es el revolucionario por excelencia. Él no hace nada, porque todo se hace por medio de él. Se deja llevar por una fuerza que ni siquiera puede resistir: la fuerza de la verdad. Ha habido místicos violentos, pero allí no se metía su ego. Cada uno sabrá lo que debe hacer si está despierto y abierto y sensibilizado a la verdad, como Jesús. Sólo los místicos son capaces de ser tan libres como para vivir la realidad tal como es.
El místico es amable, pero no deja de ser enérgico y duro cuando hace falta, y sabe responder, precisamente porque es libre de prejuicios, de miedos, de poderes y de honores y por ello es capaz, en todo momento, de ser fiel a la verdad. Por eso no se amarga nunca ni se altera.
Los místicos son los que han se han abierto confiadamente a la realidad, sin preocuparse por el resultado, pues saben que sólo en la realidad habita la verdad.
El místico vomita antes el fruto del bien y del mal para poder entrar de nuevo en el Paraíso. No enjuicia nada, sino comprende el por qué y el lugar de las cosas.
Anthony de Mello.
El místico es amable, pero no deja de ser enérgico y duro cuando hace falta, y sabe responder, precisamente porque es libre de prejuicios, de miedos, de poderes y de honores y por ello es capaz, en todo momento, de ser fiel a la verdad. Por eso no se amarga nunca ni se altera.
Los místicos son los que han se han abierto confiadamente a la realidad, sin preocuparse por el resultado, pues saben que sólo en la realidad habita la verdad.
El místico vomita antes el fruto del bien y del mal para poder entrar de nuevo en el Paraíso. No enjuicia nada, sino comprende el por qué y el lugar de las cosas.
Anthony de Mello.
EL MÍSTICO NO LO ES POR LO QUE ÉL HACE, SINO POR LO QUE DEJA QUE DIOS HAGA EN ÉL,JUEGA CON FUEGO PARA QUEMARSE , SE PONE HA TIRO PARA QUE DIOS LE INVADA.
ResponderEliminar