En Thomas Merton la CONVERSIÓN se traduce fundamentalmente en dos actitudes:
1- Búsqueda de un "hogar", de una plenitud, que echó de menos en su infancia y juventud, y que se transforma luego en un deseo más espiritual.
2- En un tratar de superar las "ilusiones", tanto de su vida personal como las de la institución eclesial o la monástica.
La conversión no es algo puntual, definitivo, sino gradual, por etapas sucesivas y crecientes. Dios se nos va revelando progresivamente como Padre en el transcurso de la vida, y nos llama a ser hijos en plenitud, a través de Jesucristo.
Hijos AMADOS y LIBRES.
Merton en su proceso de conversión, y hasta el final de su vida, anhelaba y buscaba VERDAD y PLENITUD.
MARAVILLOSO QUE HAYA UN BLOG DEDICADO A THOMAS MERTON!!!!, yo lo descubrí hace muchos años en un articulo en un diario y luego a través de un libro, felicitaciones!!!
ResponderEliminarMaria de los Angeles
Me gusta este texto de Thomas M., en otros libros de él también refleja todo esto que nos has puesto aquí.
ResponderEliminarTambién me gusta como está el blog ahora, mucho más.
Un abrazo grande
MJ