Cada mañana, antes de rezar Laudes con la comunidad, y en medio de ese tiempo de silencio saludable con que acogemos el día, tomo los textos de TM y trato de apropiarme de sus palabras y poemas para entrar en comunión con el TODO. Es importante descubrir el día que empieza como regalo, como ofrecimiento de Dios para sus hijos, como BENDICIÓN. Necesario, porque también nos acompañan dolores y enfermedades, ausencias y desengaños, partidas y carencias; ellas nos recuerdan que somos frágiles, falibles, efímeros, y que nuestro trascender está siempre en la medida del amor con que entregamos nuestro barro para ser modelado por el Espíritu. Cada jornada trae lo suyo, y en medio de lecturas, música, servicio, alabanzas y recogimiento, vamos desgranando nuestra existencia hasta quedar vacíos y desnudos, hasta caer al surco donde nos cubre la tierra y sale luego el árbol nuevo.
El dolor no es más que el anuncio del nuevo nacimiento.
La vida empieza y termina a cada momento.
Me alegra saber de ti, Hermano Manuel... tus palabras son ciertas para mi...y esta sintonía con T.Merton la debo a tí...!!!
ResponderEliminarOh! que el Fuego del ESPIRITU, OH DIOS!!!! nos lleve..dia a dia...por cualquier derrotero sorpresa o conocido...pero de SU MANO Y SU AMOR GENUINO... llevémosle a los demás Hermanos...que nuestra mano llena de SU AMOR...legue al corazón de todo aquél que se cruza en nuestro diario caminar...
AMEN... AMÉN.
AMÉN : AMEN-SE.
Que lectura más preciosa la de hoy en la Eucaristia, MANUEL..
"AMAR ES TODA LA LEY"
MI fuerte abrazo, hermano
Recibe mi saludo fraterno Padre Manuel; que crezca en santidad y en amor, son mis deseos sinceros...bendiciones en Cristo y María,
ResponderEliminarCarmen
Gracias por escribirnos, Manuel. Es una bendición leerte. Y una bendición, también para ti, poseer esa visión que te permite experimentar la armonía y la unidad en la Causa, el Origen. Que para nosotros tiene Nombre, y es todos los nombres.
ResponderEliminarFelicidades a los cubanos que tengan la suerte de encontrarte y compartir contigo.
Cuba y tú estáis presentes cuando miro al cielo.
Dejo un fragmento de una bellísima canción de Violeta, que cantó Mercedes.
“Gracias a la vida que me ha dado tanto
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto
Así yo distingo dicha de quebranto
Los dos materiales que forman mi canto
Y el canto de ustedes que es el mismo canto
Y el canto de todos que es mi propio canto
Gracias a la vida, gracias a la vida”
Estupendos pensamientos que nos descubre la necesidad de morir cada día para renacer de nuevo lavados por la Gracia del ESPÍRITU que nos fortalece y nos sostiene.
ResponderEliminarEs verdad, cada día es una oportunidad de aceptar el dolor; luchar contra la pereza; ofrecer la paciencia que necesitamos para comprender, acompañar y servir al otro y tomar la actitud de la humildad para poder morir a nuestros apegos y apetencias y volver a nacer revestidos de un hombre algo más nuevo según el ESPÍRITU.
Un fuerte abrazo en XTO.JESÚS.