viernes, 23 de septiembre de 2011

SJ: UN NUEVO LENGUAJE

Indudablemente que encontrar un nuevo lenguaje se convertirá en un propósito fundamental para TM a lo largo de toda su vida, lenguaje que se irá conformando en la misma medida en que el monje trapense vaya madurando espiritualmente. Por ello hago un paréntesis para resaltar lo importante de este asunto, que además constituye también, en mi opinión personal, uno de los aspectos básicos del nuevo ser cristiano con una nueva santidad y una nueva comunidad.
Así, en “Incursiones en lo Indecible”, TM apunta: “Lo que interesa más no on las respuestas formales ni las definiciones exactas, sino intuiciones difíciles en un momento de crisis humana”. La necesidad de encontrar un lenguaje nuevo para expresar la experiencia de lo trascendente y eterno es una de esas intuiciones y de hecho, otra mística del siglo XX, Etty Hillesum, escribió en 1942: “Para encontrar un nuevo lenguaje, apropiado a la nueva forma de ver la vida, hay que callar hasta haberlo encontrado. Y aun así no es posible callar. Sería también una huida. Hay que intentar encontrar el lenguaje mientras se habla. Asimismo, hay que seguir la transición del viejo lenguaje al nuevo en todas sus facetas” (Diario de Etty Hillesum, 137, Antropos).
Merton buscó y descubrió esa nueva manera de comunicar la experiencia honda que vivió de modo que llegará a sus contemporáneos, tan necesitados como él de una transformación interior liberadora, y de hecho sus libros resultaron cercanos y significativos para varias generaciones, y aun hoy lo son, pesar del paso del tiempo.

1 comentario:

  1. Sin duda, totalmente de acuerdo, Manuel. Merton encontró la “fórmula”. Comunica, y lo hace con un lenguaje que, aún hoy, no “está pasado de fecha de caducidad”. Se mantiene próximo y fresco.

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.