domingo, 10 de octubre de 2021

PARA TODA PERDICIÓN HAY UNA SALVACIÓN

 "Pronunciar el nombre de Jesucristo significa reconocer que ha cuidado de nosotros, que no estamos perdidos. Jesucristo es la salvación del hombre en toda circunstancia y frente a todo lo que ensombrece su vida, incluido el mal que procede de él mismo. No hay nada que no esté ya reparado en este acontecimiento: Dios se hizo hombre por nuestro bien. Lo que todavía falta sólo puede ser, en realidad, el descubrimiento de este hecho. No existimos en el seno de una oscura problemática, sino por el Dios que tuvo misericordia de nosotros antes de que fuéramos. Por muy cierto que sea que existimos en contradicción con este Dios, alejados de él y hasta enemistados con él, más cierto aún es que Dios nos ha preparado la reconciliación antes de que nos dispusiéramos a combatirlo. Por muy cierto que sea que, en nuestro alejamiento de Dios, al hombre sólo se le puede considerar como un ser perdido, mucho más cierto aún es que Dios ha actuado, actúa y actuará por nuestro bien, de manera que para toda perdición hay una salvación

(Karl Barth, Esbozo de dogmática).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.