
"Si no puedo distinguirme de la masa de otros hombres, nunca podré amar y respetar a otros como es debido. Si no me separo de ellos lo suficiente para conocer lo que es mío y lo que es de ellos, nunca descubriré lo que tengo que darles, ni nunca les permitiré la oportunidad de darme lo que deben darme. Sólo una persona puede pagar las deudas y cumplir las obligaciones; y si soy menos que persona nunca daré a otros lo que tienen derecho a esperar de mí. Si ellos son menos que personas, nunca sabrán lo que deben esperar de mí, ni nunca descubrirán que tienen algo que darme. Normalmente tenemos obligación de educarnos recíprocamente cumpliendo las justas necesidades mutuas. Pero en una sociedad en que la personalidad está oscurecida y disuelta, los hombres nunca aprenden a encontrarse a sí mismos y, por consiguiente, nunca aprenden a amarse unos a otros".
Thomas Merton.
Los hombres no son islas, 226.
Encontrarse a uno mismo es un desafío constante. Lo que cuenta es el espíritu de búsqueda. En sinceridad y con valentía.
ResponderEliminarSan, dónde te encuentras.
Roberto
Ser persona es antes que nada ser para el amor a otra persona. Nada más difícil a veces y nada más hermoso a la vez.
ResponderEliminarEmilio