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viernes, 28 de agosto de 2009

Crecer espiritualmente, amando a otras personas.


"Son pocas las personas que se santifican en el aislamiento. Muy pocas consiguen ser perfectas en la soledad absoluta.

Vivir con otras personas y aprender a perdernos en la comprensión de sus debilidades y deficiencias puede ayudarnos a ser verdaderos contemplativos, ya que no hay un medio mejor para librarnos de la rigidez, la crudeza y la aspereza de nuestro arraigado egoísmo, que es el único obstáculo insuperable para la luz y la acción infusas del Espíritu Santo.

Ni siquiera la valerosa aceptación de las pruebas interiores en una soledad absoluta puede compensar totalmente la obra de purificación realizada en nosotros por la paciencia y la humildad, amando a otras personas y comprendiendo con benevolencia sus necesidades y exigencias menos razonables.

Los eremitas están siempre expuestos al peligro de secarse y endurecerse en su excentricidad. Al vivir sin contacto con otras personas, tienden a perder ese sentido profundo de las realidades espirituales que sólo puede dar el amor puro.

¿Crees que el camino hacia la santidad consiste en encerrarte con tus oraciones, tus libros y las meditaciones que te agradan e interesan a tu mente, para, rodeado de muros, protegerte de las personas, a las que consideras estúpidas? ¿Crees que el camino hacia la contemplación se encuentra en el rechazo de actividades y trabajos que son necesarios para el bien de otros, pero que te aburren y te distraen? ¿Te imaginas que vas a descubrir a Dios enclaustrándote en una crisálidad de placeres ascéticos y espirituales, en lugar de renunciar a todos tus gustos, deseos, ambiciones y satisfacciones por amor a Cristo, que ni siquiera vivirá dentro de tí si no puedes encontrarlo en otras personas?".


Thomas Merton

Nuevas semillas de contemplación, 202-203

3 comentarios:

SAN dijo...

Sin amor no puede crecer nada. El amor es nuestro origen y nuestro fin. Un amor vivido en el otro y con el otro, para los otros. El Amor es milagro, don, maravilla, alegría, plenitud. Amando se vive, sin amor sólo se dura.

Inés García, aci dijo...

"Vivir con otras personas y aprender a perdernos en la comprensión de sus debilidades y deficiencias puede ayudarnos a ser verdaderos contemplativos, ya que no hay un medio mejor para librarnos de la rigidez, la crudeza y la aspereza de nuestro arraigado egoísmo, que es el único obstáculo insuperable para la luz y la acción infusas del Espíritu Santo".

Todas las personas somos tan diferentes unas de otras que siempre es un don del Amor poder vivir en comunidad.Saliendo de nuestro propio querer, amor, interés para evitar ser egoístas, como leemos en este texto de TM, eso nos va transformando por medio de la experiencia diaria en contemplativos, personas que se ayudan a encontrar a Dios en todas las cosas, y a todas en El.

Anónimo dijo...

" Y esta mañana, al ver la multitud de estrellas sobre la rama del pino en el bosque , fuí repentinamente impactado, si puede decirse, con el paquete completo del significado de todo, que la inmensa misericordia de Dios estaba sobre mí, que en su infinita bondad Dios me había señalado, me había dado esta vocación a partir del amor....No importaba lo que cualquier otro pudiera decir o hacer sobre ello, aunque lo juzgaran o lo evaluaran, todo resultaba irrelevante ante la realidad de mi vocación por la soledad, aunque no sea un ermitaño típico. No interesa cómo pueda o no ser clasificado, a la luz de este hecho del amor de Dios y la forma que ha tomado en el misterio d emi vida.
La única respuesta es emerger del propio yo con todo lo que uno es ( que es nada), y verter esa nada con la gratitud de que Él sea quien es.
¿ Quien es así hacia Dios?"

Diario de un ermitaño.
Thomas Merton

Ser parte de todo...

¡Oh Dios! Somos uno contigo. Tú nos has hecho uno contigo. Tú nos has enseñado que si permanecemos abiertos unos a otros Tú moras en nosotros. Ayúdanos a mantener esta apertura y a luchar por ella con todo nuestro corazón. Ayúdanos a comprender que no puede haber entendimiento mutuo si hay rechazo. ¡Oh Dios! Aceptándonos unos a otros de todo corazón, plenamente, totalmente, te aceptamos a Ti y te damos gracias, te adoramos y te amamos con todo nuestro ser, nuestro espíritu está enraizado en tu Espíritu. Llénanos, pues, de amor y únenos en el amor conforme seguimos nuestros propios caminos, unidos en este único Espíritu que te hace presente en el mundo, y que te hace testigo de la suprema realidad que es el amor. El amor vence siempre. El amor es victorioso. AMÉN.
-Thomas Merton-

Santidad es descubrir quién soy...

“Es cierto decir que para mí la santidad consiste en ser yo mismo y para ti la santidad consiste en ser tú mismo y que, en último término, tu santidad nunca será la mía, y la mía nunca será la tuya, salvo en el comunismo de la caridad y la gracia. Para mí ser santo significa ser yo mismo. Por lo tanto el problema de la santidad y la salvación es en realidad el problema de descubrir quién soy yo y de encontrar mi yo verdadero… Dios nos deja en libertad de ser lo que nos parezca. Podemos ser nosotros mismos o no, según nos plazca. Pero el problema es este: puesto que Dios solo posee el secreto de mi identidad, únicamente él puede hacerme quien soy o, mejor, únicamente Él puede hacerme quien yo querré ser cuando por fin empiece plenamente a ser. Las semillas plantadas en mi libertad en cada momento, por la voluntad de Dios son las semillas de mi propia identidad, mi propia realidad, mi propia felicidad, mi propia santidad” (Semillas de contemplación).

LA DANZA GENERAL.

"Lo que es serio para los hombres a menudo no tiene importancia a los ojos de Dios.Lo que en Dios puede parecernos un juego es quizás lo que El toma más seriamente.Dios juega en el jardin de la creación, y, si dejamos de lado nuestras obsesionessobre lo que consideramos el significado de todo, podemos escuchar el llamado de Diosy seguirlo en su misteriosa Danza Cósmica.No tenemos que ir muy lejos para escuchar los ecos de esa danza.Cuando estamos solos en una noche estrellada; cuando por casualidad vemos a los pajaros que en otoño bajan sobre un bosque de nísperos para descansar y comer; cuando vemos a los niños en el momento en que son realmente niños; cuando conocemos al amor en nuestros corazones; o cuando, como el poeta japonés Basho, oímos a una vieja ranachapotear en una solitaria laguna; en esas ocasiones, el despertar, la inversiónde todos los valores, la "novedad", el vacío y la pureza de visión que los hace tan evidentes nos dan un eco de la danza cosmica.Porque el mundo y el tiempo son la danza del Señor en el vacío. El silencio de las esferas es la música de un festín de bodas. Mientras más insistimos en entender mal los fenómenos de la vida, más nos envolvemos en tristeza, absurdo y desesperación. Pero eso no importa, porque ninguna desesperación nuestra puede alterar la realidad de las cosas, o manchar la alegría de la danza cósmica que está siempre allí. Es más, estamos en medio de ella, y ella está en medio de nosotros, latiendo en nuestra propia sangre, lo queramos o no".
Thomas Merton.

ORACIÓN DE CONFIANZA...

“Señor Dios mío, no tengo idea de hacia dónde voy. No conozco el camino que hay ante mí. No tengo seguridad de dónde termina. No me conozco realmente, y el hecho de que piense que cumplo tu voluntad, no significa que realmente lo haga. Pero creo que el deseo de agradarte te agrada realmente. Y espero tener este deseo en todo lo que estoy haciendo. Espero no hacer nunca nada aparte de tal deseo. Y sé que si hago esto, tú me llevarás por el camino recto, aunque yo no lo conozca. Por lo tanto, siempre confiaré en ti aunque parezca perdido y a la sombra de la muerte. No temeré, pues tú estás siempre conmigo y no me dejarás que haga frente solo a mis peligros

Para intercambiar comentarios sobre Thomas Merton y otros maestros contemporaneos del espíritu.