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miércoles, 29 de mayo de 2013

EL ASCETISMO MÁS SEGURO ES LA INSEGURIDAD...

"El camino hacia la contemplación es una oscuridad tan intensa que ya no es ni siquiera dramática. No queda nada en ella que pueda ser asido y acariciado como heroico ni aun insólito. Así, para el contemplativo, hay un valor supremo en la rutina ordinaria de trabajo, pobreza, penalidad y monotonía que caracteriza la vida de la gente pobre, ininteresante y olvidada del mundo.
Cristo, que vino a la tierra para formar contemplativos y enseñar a los hombres la ruta de la santidad y la oración, habría podido fácilmente rodearse de ascetas que lo dejaran morir de hambre y aterraran a la gente con extraños éxtasis. Pero sus Apóstoles fueron trabajadores, pescadores, publicanos que se distinguían tan solo por su indiferencia hacia la mayor parte de la complicada red de devociones, prácticas rituales y moral gimnástica de los santos profesionales.
El ascetismo más seguro es la inseguridad amarga, el trabajo y pequeñez de los realmente pobres. Depender absolutamente de otros. Ser desconocido, menospreciado y olvidado. No conocer la comodidad ni la limpieza. Vivir en la suciedad y comer mal. Recibir órdenes y trabajar mucho por poco dinero. Esto es una dura escuela, que la mayoría de las personas piadosas hacen todo lo posible por evitar".

Thomas Merton
"Semillas de contemplación"

lunes, 27 de mayo de 2013

POR UNA NUEVA CULTURA MUNDIAL

"Aguardamos con esperanza no una era de eclecticismo y sincretismo, sino una era de comprensión y adaptación que permita sintetizar y utilizar todo lo que hay de bueno y de noble en todas las tradiciones del pasado. Si el mundo debe sobrevivir y si la civilización debe soportar hasta resistir su crísis actual, para recuperar su dimensión de "sabiduría", debemos anhelar una nueva cultura mundial que tome en cuenta todas las filosofías civilizadas.
El erudito cristiano está obligado por su sagrada vocación a entender e incluso preservar la herencia de todas las grandes religiones, en la medida en que contengan verdades que no pueden ser desdeñadas y que ofrecen discernimientos preciosos del propio cristianismo. Así como los monjes de la Edad Media y los escolásticos del siglo XIII preservaron las tradiciones de Grecia y de Roma, y adaptaron lo que descubrieron en la filosofía y la ciencia árabes, así nosotros también tenemos al frente una inmensa obra por realizar".

Thomas MERTON
"Místicos y maestros zen"

IGNACIO DE ANTIOQUÍA.


Las 7 cartas de Ignacio que la Iglesia conserva y atesora nos acercan  a la situación de la comunidad cristiana a principios del siglo II.  Ignacio, obispo, había sido condenado a morir devorado por las fieras en Roma. Hacia ella le llevan los soldados imperiales, y en el camino escribe estas 7 cartas.  Expresan su preocupación por la comunidad que deja atrás, por las persecuciones de sus hermanos, por los falsos maestros y las indisciplinas y divisiones de la Iglesia. Ignacio rechaza a los que negaban la vida física de Jesucristo, y rechazaban la comunión, y a los que veían a Jesús como un simple maestro dentro del judaísmo. Ignacio reafirma una y otra vez la realidad de la humanidad de Jesucristo. Ignacio es más cercano a la teología de Juan que a la de Pablo. Es el primero que emplea la frase “Iglesia Católica”. También subraya la importancia del obispo local, y es el primer testigo de la existencia de un episcopado monárquico (Nada debe hacer la Iglesia sin contar con el obispo, y quien no se somete a él, no está sometido a Dios). Expresa de modo único el sentido del martirio para los primeros cristianos.

CUANDO DIOS SE DESCUBRE EN NOSOTROS...

"Nuestro descubrimiento de Dios es, en cierto modo, el descubrimiento que hace Dios de nosotros. No podemos ir al cielo a buscarlo, porque no tenemos modo de saber dónde está el cielo ni lo que es. Él baja del cielo y nos encuentra. Nos mira desde la
profundidad de Su realidad infinita, que está en todas partes, y mirándonos nos da una realidad superior en que nosotros a nuestra vez Lo descubrimos. Sólo Lo conocemos tanto cuanto somos conocidos por Él, y nuestra contemplación de Él es una
participación en la contemplación de Sí mismo.
Nos convertimos en contemplativos cuando Dios se descubre a Sí mismo en nosotros. En ese momento, se abre el punto de nuestro contacto con Él, y pasamos por el centro de nuestra alma y entramos en la eternidad"
.

THOMAS MERTON
"Semillas de contemplación"

sábado, 25 de mayo de 2013

TRINIDAD A QUIEN ADORO...

Este domingo la litúrgia católica celebra la solemnidad de la Santísima Trinidad. Me gusta decir que en este día miramos a Dios como misterio; el concepto DIOS está devaluado a causa del uso, del mal uso. Aunque los teólogos han desplegado toda su capacidad para intentar mostrarnos racionalmente lo que ocurre en el ser de Dios, prefiero aquello de que "si lo entiendes, no es Dios". Dios es MISTERIO DE AMOR. Ayer en la tarde explicaba a los niños algo de esto y les decía: Dios está con nosotros, como Espíritu está en nosotros, y por eso también nosotros somos MISTERIO. Lo mismo que Dios, cada ser humano es inexplicable. En esto radica fundamentalmente nuestra DIGNIDAD. Me parece muy importante y necesario que nuestro "discurso" acerca de Dios vaya siempre a la par del descubrimiento de la hermosura de la criatura humana que tiene su fuente en Dios. Santa Teresa, en el primer capítulo de MORADAS lo dice de un modo especial, y Merton, en la EPIFANÍA DE LOUISVILLE. Cada uno de nosotros es un reflejo único del Dios UNO Y TRINO.

"!Oh, mis Tres, mi Todo, mi Bienaventuranza, Soledad infinita, Inmensidad donde me pierdo! Me entrego a Tí como víctima. Sumérgete en mí para que yo me sumerja en Tí hasta que vaya a contemplar en Tú luz el abismo de todas tus grandezas".
(Isabel de la Trinidad)

jueves, 23 de mayo de 2013

ÚNICOS

"¡La originalidad cristiana no es una uniformidad! Toma a cada uno como es, con su propia personalidad, con sus propias características, con su cultura y lo mantiene así, porque es una riqueza. Pero le da algo más: ¡le da el sabor! Esta originalidad cristiana es hermosa. Pero cuando queremos crear una uniformidad --en que todos son salados de la misma manera--, las cosas serán como cuando una mujer arroja sal en exceso y se siente solo el sabor de la sal y no el sabor de esa sabrosa comida salada. La originalidad cristiana es esto: cada uno es como es, con los dones que el Señor le ha dado".

Francisco.

miércoles, 22 de mayo de 2013

SANTIDAD E IMPERFECCIÓN

"Más de una vez Jesús tuvo que reprender a Sus Apóstoles, que discutían y luchaban por los primeros lugares en Su Reino. Dos de ellos, Santiago y Juan, intrigaban por obtener asiento a su derecha e izquierda en el Reino. No es insólito, en la vida de los santos, ver que unos santos no estuvieron siempre de acuerdo con otros santos. Pedro no se avino siempre con Pablo, ni Felipe Neri con Carlos Borromeo. Y a veces hombres muy santos han sido exasperantes, y muy fatigoso el vivir con ellos. Si no me crees, acaso sea porque tú piensas que los santos son siempre perfectos y nunca tienen faltas
con que luchar. Pero Dios permite a veces que los hombres conserven defectos e imperfecciones, miopías y excentricidades, aun después de haber alcanzado un alto grado de santidad, y a causa de esas cosas su santidad permanece oculta para ellos y
para los demás. Si la santidad de todos los santos hubiese sido siempre claramente visible para todos, no habrían llegado nunca a ser pulidos y perfeccionados por las pruebas y persecuciones, por las críticas y humillaciones y la oposición de la gente con
quien vivían".

Thomas MERTON, "Semillas de contemplación".

sábado, 18 de mayo de 2013

ESPÍRITU: AGUA, VIENTO Y FUEGO


Este fin de semana, PENTECOSTÉS, pasar de la Pascua litúrgica a la Pascua de la vida cotidiana.
Pentecostés es salir de nuestros sepulcros de miedo e inseguridad, para vivir en la alegría y la paz del Resucitado. Al mostrar sus heridas, Jesús dice: no hay que temer al dolor y a la muerte, yo estuve en el sepulcro, he salido y he vencido. Ahora todos los sepulcros están abiertos, no teman...

Ser cristiano es vivir sin miedos: es abrirse a la novedad de Dios, a la multiplicidad de sus dones, a la diversidad y a la unidad de su creación. .

Nuevo nacimiento (Bautismo): "Con Espíritu Santo y fuego".
Nueva vida (Evangelio, camino cristiano): "Como el Padre me ha enviado, así les envío yo".
Nueva comunidad (Iglesia): De la torre de Babel a Pentecostés. "A cada uno se le da una manifestación del Espíritu para el bien común"

Tres imágenes para pensar el Espíritu y sus dones:
1. Agua: vida, torrente, limpieza.
2. Viento: brisa, huracán, empuje, confianza.
3. Fuego: Transformación, fortaleza.

"RENUEVA, SEÑOR, LA FAZ DE LA TIERRA"

viernes, 17 de mayo de 2013

COMO EL VIENTO QUE SOPLA....

"Para percibir en nosotros algo del Espíritu Santo en Pentecostés, podría servir de ayuda ponerse simplemente contra el viento, cerrar los ojos y percibir con todos los sentidos el viento, cómo acaricia suavemente mis mejillas, cómo sopla fuertemente, cómo lo pone a uno en movimiento. Quien entienda el viento como símbolo del Espíritu de Dios podrá sentir inmediatamente el Espíritu de Dios en el viento. No es simple imaginación, es realidad. El Espíritu de Dios está en el viento, está en este momento cuando el viento sopla sobre mí, me limpia, me reanima, me acaricia y me arrulla. En el viento, siento la vida de la Naturaleza, pero, al mismo tiempo, experimento en él también la vida del Espíritu Santo, sí el Espíritu Santo mismo".

Anselm Grün

EN LO CREADO ENCONTRAMOS EL CIELO O EL INFIERNO

"En todo lo creado, los que todavía no amamos perfectamente a Dios podemos hallar algo que refleja la plenitud del cielo y algo que semeja la angustia del infierno. Gustamos algo del gozo de la bienaventuranza y algo del dolor de la pérdida, que es la condenación.
Lo que de plenitud encontramos en las criaturas pertenece a la realidad del ser creado, una realidad que procede de Dios, pertenece a Dios y refleja a Dios. La angustia que hallamos en ellas pertenece al desorden de nuestro deseo, que busca en su objeto una
realidad mayor que la que hay en él; una plenitud mayor de la que una cosa creada es capaz de dar. En lugar de adorar a Dios a través de Su creación, estamos siempre intentando adorarnos a nosotros mismos mediante las criaturas.
Pero adorarnos a nosotros mismos es no adorar nada. Y la adoración de la nada es el infierno".

Thomas Merton
"Semillas de contemplación"

martes, 14 de mayo de 2013

PENTECOSTÉS: cambio y conflicto.

"Dondequiera que haya una Iglesia hay un Pentecostés en miniatura. Pentecostés significa "vida nueva", y toda vida nueva entraña cambios, cambios en nuestras vidas. Pero esos cambios no son fáciles. Un cambio de vida siempre es un conflicto. La experiencia básica de los religiosos de nuestro tiempo ha consistido en el conflicto de reconocer en lo profundo del corazón el llamado de Dios y en sentirse a la vez impedidos de responder a él, de realizar lo que él solicita de nosotros".
 
Thomas Merton.

LA INDIVIDUALIDAD NO ES IMPERFECCIÓN.

"Un árbol da gloria a Dios, ante todo, siendo un árbol. Porque al
ser lo que Dios quiere que sea está imitando una idea que está en Dios y que no es distinta de la esencia de Dios, y por lo tanto un árbol imita a Dios siendo un árbol. Cuanto más un árbol se realiza a sí mismo, tanto más se acerca a Dios. Si intentara ser otra cosa, algo que nunca estuvo destinado a ser, sería menos semejante a Dios y por ende Le daría menos gloria.
No hay dos seres creados exactamente iguales. Y su individualidad no es imperfección. Al contrario: la perfección de una cosa creada no está meramente en su conformidad con un tipo abstracto, sino en su identidad individual consigo misma. Este determinado árbol dará gloria a Dios extendiendo sus raíces en la tierra y alzando sus
ramas hacia el aire y hacia la luz de un modo que antes no siguió, ni seguirá después, ningún otro árbol.
¿Imaginas que todas las cosas individuales creadas en el mundo son imperfectas tentativas de reproducir un tipo ideal que el Creador nunca logró realizar en la tierra? Si ello es así, no le dan gloria, sino que proclaman que Él no es un Creador perfecto. Por lo tanto, todo ser particular, en su individualidad, su naturaleza y entidad concretas, con todas sus características cualidades particulares, y su inviolable identidad, da gloria a Dios al ser precisamente lo que Él quiere que sea aquí y ahora, en las circunstancias ordenadas para él por Su Amor y Su Arte infinitos".

Thomas MERTON

ORÍGENES DEL PENSAMIENTO CRISTIANO 1



Cristianismo e historia están estrechamente vinculados. Jesús nació, vivió y murió en un tiempo y espacio concretos de la historia humano, y la comunidad de Jesús, la Iglesia, lo mismo. Para entender el camino cristiano, su crecimiento, su teología y su pensamiento en general debemos conocer su historia.

El cristianismo nació en Palestina, y la Iglesia nace y crece en un contexto particular: Judaísmo, Imperio Romano y cultura griega. Los tres le dejaron su impronta: religiosa, filosófica, ritual, jurídica, cultural.

Los primeros cristianos provenían del mundo judío, se sentían judíos, asistían los sábados a la sinagoga. Los apóstoles ejercieron un ministerio itinerante, junto a doctores y profetas, mientras recibían el apoyo de comunidades que poco a poco se fueron organizando hasta que los ministerios carismáticos son sustituidos por jerarquías locales: diáconos, presbíteros, obispos.

También el judeocristianismo, cuyo centro fundamental será Jerusalén, empezará a convivir con los cristianos judíos de cultura griega, dando lugar a las primeras tensiones internas. Pablo se convierte en apóstol de los gentiles, llevando el cristianismo más allá de las fronteras judías.

La primera literatura cristiana es la que tenemos en el canon del Nuevo Testamento: las cartas de Pablo, los Evangelios, etc. Luego aparecen los llamados PADRES APOSTÓLICOS, escritos dirigidos a otros cristianos, obras de la Iglesia en su intimidad, útiles para conocer la vida y el sentir de la primera Iglesia. A continuación vendrán los APOLOGISTAS GRIEGOS: escritores cuyo propósito es defender la fe cristiana ante las falsas acusaciones que provocaban las persecuciones. El más importante de los apologistas es JUSTINO, mártir.

Esta primera etapa de la vida de la Iglesia se conoce como la ERA DE LOS MÁRTIRES, signada por la persecución en diversos momentos. Los primeros conflictos con el estado nacen en época de Nerón.  Hasta el siglo III los cristianos fueron perseguidos periódicamente. Pedro y Pablo bajo Nerón; Ignacio de Antioquía, Policarpo y Justino, en el siglo II; Orígenes fue martirizado en el siglo III. La llamada “gran persecución” tuvo lugar en este siglo, bajo Dioclesiano y Galerio. El Edicto de Tolerancia, y luego el Edicto de Milán (Constantino) fueron el triunfo final del cristianismo.

 Las críticas que los cristianos recibían pueden catalogarse de dos maneras: los rumores populares y las críticas que provenían de las clases cultas. Acusaciones de que las reuniones cristianas acababan en orgías, que se hacían sacrificios humanos, que adoraban un asno crucificado. Por otra parte, se les tenía por gente ignorante, necia, de clases inferiores, discípulos de un malhechor. Fue labor de los llamados APOLOGISTAS refutar estas acusaciones.

sábado, 11 de mayo de 2013

ASCENSIÓN DEL SEÑOR

"Ahora que estamos llegando al final del tiempo pascual, vale la pena notar que la Pascua, clave y centro de la fe, punto de partida cronológico y teológico de la fe cristiana, es un acontecimiento de una riqueza tal, que es imposible describirlo con una sola imagen. Por eso celebramos el misterio pascual durante cincuenta días, y luego prolongamos esta celebración cada domingo. Se trata de un acontecimiento único, aunque nosotros, para entenderlo mejor, lo celebremos por etapas. Dicho de otra manera: Viernes Santo, Pascua, Ascensión y Pentecostés son la misma realidad. Se puede hablar de cuatro momentos pero más bien son distintas perspectivas del mismo acontecimiento". (Martín Gelabert, op).

"El tiempo Pascual culmina con dos fiestas: la Ascensión del Señor y Pentecostés. La Ascensión nos muestra el fin de nuestra vida. Jesús ha subido a los cielos con su cuerpo mortal y está ahora junto a Dios, sentado a su diestra. Con esto está ya en Dios una parte de nosotros; una parte ha llegado al cielo, está al otro lado del umbral de la muerte.
 La fiesta de la Ascensión del Señor quiere dirigir nuestra mirada a nuestra meta, al cielo. No queremos distraernos con los asuntos terrenales, sino mirar a Cristo, que está ya junto al Padre.
Lo que a primera vista parece un mensaje moral es en realidad un mensaje liberador, porque para quien puede vivir pensando que su patria es el cielo se relativizan muchas cosas de su vida...".
(Anselm Grün)

En los relatos evangélicos hay una tensión evidente entre la subida de Jesús, al Cielo, a la derecha del Padre, con la pregunta de los ángeles:
"¿Qué hacen ahí mirando al cielo?
Vayan a Galilea, allí le verán". 

Imágenes metafóricas de una realidad que está más allá de nuestra comprensión racional. Misterio de Amor que tratamos de describir a medias. Cielo y Tierra apuntan a una experiencia que supera o no lo inmediato, para alcanzar una VISIÓN.
 Cuando Teresa de Jesús comenta la oración del Padrenuestro, pregunta: ¿Dónde está el cielo? y responde del mismo modo: 
Allí donde está Dios, está el Cielo.  

miércoles, 8 de mayo de 2013

TIEMPO DE NACER, TIEMPO DE EMANCIPACIÓN

“Puesto que todas las cosas tienen su momento, hay un tiempo en que estar en gestación. En efecto, hemos de empezar en un vientre social. Pero hay también un tiempo en que nacer. El que ha nacido espiritualmente como identidad madura queda liberado del vientre circundante de mito y prejuicio. Aprende a pensar por sí mismo, ya no guiado por los dictados de la necesidad y por los sistemas y procesos trazados para crear necesidades artificiales y luego "satisfacerlas". Esa emancipación puede tomar dos formas: primero, la de la vida activa, que libera de la esclavización a la necesidad al considerar y atender las necesidades de los demas, sin pensar en intereses personales o compensaciones. Y, segundo, la vida contemplativa, que no ha de construirse como una escapatoria del tiempo y la materia, de la responsabilidad social y de la vida de los sentidos, sino más bien como un avance hacia la soledad y el desierto... En el desierto de soledad y vacío es donde se ve que son ilusorios el miedo a la muerte y la necesidad de autoafirmación. Cuando se mira esto de frente, la angustia no siempre queda vencida, pero puede ser aceptada y comprendida. Así, en el corazón de la angustia se encuentran los dones de paz y comprensión: no simplemente en la iluminación y la liberación personales, sino en el compromiso y la comprensión, pues el contemplativo debe asumir la angustia universal y la situacion ineludible del hombre mortal. El solitario, lejos de encerrase en sí mismo, se hace a todos los hombres. Reside en la soledad, la pobreza, la indigencia de todo hombre”.

Thomas MERTON
"Incursiones en lo indecible"

VIVENCIA PERSONAL

"En tiempos de zozobra y perplejidad, cuando no de confusión, extremas como los nuestros, Merton concluye que, por encima de programas de acción o de misión específicos, más allá de las pertinentes adaptaciones estructurales o coyunturales monásticas o eclesiásticas, testimoniar la vivencia personal de la inmanencia y de la trascendencia de Dios e "irradiar" nuestra intimidad con Cristo y nuestra apertura al Espíritu sigue siendo la única propuesta cristiana necesaria y suficiente, un apostolado exigente y exigible y una respuesta plenamente humana y convincente. Algo que ha de concretarse en todos los ámbitos de nuestra vida, religiosa o seglar, profesional, matrimonial, comunitaria, etc... Y en todas nuestras relaciones: con Dios a través de la oración, con el prójimo y la naturaleza a través de la caridad y la alabanza y con nosotros a través de la escucha y la humildad".
Fernando Beltrán Llavador

lunes, 6 de mayo de 2013

DAME LA SIMPLICIDAD DEL AMOR....

"Desata mis manos y libra mi corazón de la pereza. Líbrame del ocio que se disfraza de actividad cuando la actividad no se me exige, y de la cobardía que hace lo que no se le pide para escapar al sacrificio.
Pero dame la fuerza que Te espera en el silencio y la paz. Dame la humildad, sola residencia del descanso, y líbrame del orgullo, que es la más pesada de las cargas. Y llena mi corazón entero y mi alma de la simplicidad del amor. Ocupa mi vida entera con el solo pensamiento y el solo deseo del amor, para que pueda amar, no por el mérito o la perfección, no por la virtud o la santidad, sino por Dios solo".
 
Thomas MERTON
"Semillas de contemplación"

viernes, 3 de mayo de 2013

VER Y APRECIAR LAS COSAS CREADAS

"No es cierto que los santos y grandes contemplativos no se fijaran en las cosas creadas y no comprendieran ni apreciaran el mundo y sus escenas y sonidos y la gente que vive en él. ¿Crees que su amor a Dios era compatible con el odio a las cosas que lo reflejaban y hablaban de Él en todas partes?
Dirás que debían de estar absortos en Dios y no tenían ojos para ver nada que no fuera Él. ¿Crees que iban por el inundo con rostros de piedra y no escuchaban las voces de los hombres que les hablaban ni comprendían las alegrías y tristezas de los que estaban en
torno suyo?
Por estar los santos absortos en Dios eran verdaderamente capaces de ver y apreciar las cosas creadas; porque amaban a Dios solo, sólo ellos amaban a todos.
¿Crees que un santo tiene que excusar su interés en las cosas creadas dando traspiés en su lenguaje para introducir un montón de observaciones convencionales e insípidas acerca de Dios cada vez que habla o piensa acerca del mundo y de lo que hay en él? Un
santo es capaz de hablar del mundo sin ninguna explícita referencia a Dios, de tal modo que sus afirmaciones den mayor gloria a Dios y despierten mayor amor a Dios que las observaciones de alguien menos santo, que tenga que esforzarse por establecer una
arbitraria relación entre las criaturas y Dios mediante gastadas analogías y metáforas, tan débiles que hacen pensar que algo le pasa a la religión.
Los santos saben que el mundo y todo lo hecho por Dios es bueno, mientras que los que no lo son, o creen que las cosas creadas son impías o no se preocupan por la cuestión en ningún sentido, porque sólo se interesan por si mismos. Los ojos del santo hacen santa toda belleza, y las manos del santo consagran todo lo que tocan a la gloria de Dios, y el santo no se ofende nunca por nada ni juzga el pecado de nadie, porque no conoce el pecado. Conoce la misericordia de Dios y está en la tierra para traer esa misericordia a todos los hombres".

Thomas MERTON
"Semillas de Contemplación"

Ser parte de todo...

¡Oh Dios! Somos uno contigo. Tú nos has hecho uno contigo. Tú nos has enseñado que si permanecemos abiertos unos a otros Tú moras en nosotros. Ayúdanos a mantener esta apertura y a luchar por ella con todo nuestro corazón. Ayúdanos a comprender que no puede haber entendimiento mutuo si hay rechazo. ¡Oh Dios! Aceptándonos unos a otros de todo corazón, plenamente, totalmente, te aceptamos a Ti y te damos gracias, te adoramos y te amamos con todo nuestro ser, nuestro espíritu está enraizado en tu Espíritu. Llénanos, pues, de amor y únenos en el amor conforme seguimos nuestros propios caminos, unidos en este único Espíritu que te hace presente en el mundo, y que te hace testigo de la suprema realidad que es el amor. El amor vence siempre. El amor es victorioso. AMÉN.
-Thomas Merton-

Santidad es descubrir quién soy...

“Es cierto decir que para mí la santidad consiste en ser yo mismo y para ti la santidad consiste en ser tú mismo y que, en último término, tu santidad nunca será la mía, y la mía nunca será la tuya, salvo en el comunismo de la caridad y la gracia. Para mí ser santo significa ser yo mismo. Por lo tanto el problema de la santidad y la salvación es en realidad el problema de descubrir quién soy yo y de encontrar mi yo verdadero… Dios nos deja en libertad de ser lo que nos parezca. Podemos ser nosotros mismos o no, según nos plazca. Pero el problema es este: puesto que Dios solo posee el secreto de mi identidad, únicamente él puede hacerme quien soy o, mejor, únicamente Él puede hacerme quien yo querré ser cuando por fin empiece plenamente a ser. Las semillas plantadas en mi libertad en cada momento, por la voluntad de Dios son las semillas de mi propia identidad, mi propia realidad, mi propia felicidad, mi propia santidad” (Semillas de contemplación).

LA DANZA GENERAL.

"Lo que es serio para los hombres a menudo no tiene importancia a los ojos de Dios.Lo que en Dios puede parecernos un juego es quizás lo que El toma más seriamente.Dios juega en el jardin de la creación, y, si dejamos de lado nuestras obsesionessobre lo que consideramos el significado de todo, podemos escuchar el llamado de Diosy seguirlo en su misteriosa Danza Cósmica.No tenemos que ir muy lejos para escuchar los ecos de esa danza.Cuando estamos solos en una noche estrellada; cuando por casualidad vemos a los pajaros que en otoño bajan sobre un bosque de nísperos para descansar y comer; cuando vemos a los niños en el momento en que son realmente niños; cuando conocemos al amor en nuestros corazones; o cuando, como el poeta japonés Basho, oímos a una vieja ranachapotear en una solitaria laguna; en esas ocasiones, el despertar, la inversiónde todos los valores, la "novedad", el vacío y la pureza de visión que los hace tan evidentes nos dan un eco de la danza cosmica.Porque el mundo y el tiempo son la danza del Señor en el vacío. El silencio de las esferas es la música de un festín de bodas. Mientras más insistimos en entender mal los fenómenos de la vida, más nos envolvemos en tristeza, absurdo y desesperación. Pero eso no importa, porque ninguna desesperación nuestra puede alterar la realidad de las cosas, o manchar la alegría de la danza cósmica que está siempre allí. Es más, estamos en medio de ella, y ella está en medio de nosotros, latiendo en nuestra propia sangre, lo queramos o no".
Thomas Merton.

ORACIÓN DE CONFIANZA...

“Señor Dios mío, no tengo idea de hacia dónde voy. No conozco el camino que hay ante mí. No tengo seguridad de dónde termina. No me conozco realmente, y el hecho de que piense que cumplo tu voluntad, no significa que realmente lo haga. Pero creo que el deseo de agradarte te agrada realmente. Y espero tener este deseo en todo lo que estoy haciendo. Espero no hacer nunca nada aparte de tal deseo. Y sé que si hago esto, tú me llevarás por el camino recto, aunque yo no lo conozca. Por lo tanto, siempre confiaré en ti aunque parezca perdido y a la sombra de la muerte. No temeré, pues tú estás siempre conmigo y no me dejarás que haga frente solo a mis peligros

Para intercambiar comentarios sobre Thomas Merton y otros maestros contemporaneos del espíritu.