
(La palabra LUZ está siempre vinculada con Cristo; tanto en la Escritura, en los textos de nuestro Breviario, en las oraciones litúrgicas, etc, siempre aparece Cristo vinculado a la luz. Él es luz para nosotros, luz para el mundo. Me gusta usar esa imagen en mis meditaciones, me gusta imaginarme lleno de esa luz
El texto de Merton habla también de “su acción secreta en nuestros corazones”. Es el obrar de Dios imperceptible para nosotros, pero siempre actuante, pues Dios nunca deja de trabajar en nosotros).
“Nacemos hoy en Cristo a ese abrazo y a esa paz. ¿Puede sorprendernos que sintamos en nuestros corazones la exultación de la luz divina que afluye a nuestro espíritu desde la presencia del Salvador recién nacido y nos transforma de gloria a gloria en Su imagen?”
“En todas sus oraciones, la Iglesia nos sumerge en la Luz de Dios que brilla en la oscuridad del mundo, para que seamos iluminados y transformados por la presencia del Salvador recién nacido, y así nazca y viva verdaderamente en nosotros haciendo que todos nuestros pensamientos y acciones brillen en Él mismo”.
“No tengan miedo de Él. Dios se ha vaciado de Sí mismo y ha venido a nosotros como niño, para que los que no hemos sido salvados por el temor, sino sólo destruidos por él, recobremos ahora ánimo y nos salvemos por la confianza”.
1 comentario:
Al comenzar un día, uno se tendría que preguntar cual es la luz del hoy, para que la ilusión siempre esté presente. El sentido de las cosas no sólo se encuentra sino que se hace.
Jose
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