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miércoles, 31 de marzo de 2021

HISTORIAS DONDE EL CIELO Y LA TIERRA SE TOCAN

"Érase dos monjes que en un antiguo libro habían leído que en el otro extremo del mundo había un lugar en el que el cielo y la tierra se tocaban. Entonces decidieron buscarlo y no regresar hasta haberlo encontrado. Atravesaron el mundo, superaron incontables peligros, sufrieron todas las privaciones que una gira semejante con lleva y todas las tentaciones que a uno pueden apartarlo de su objetivo. Ellos habían leído que allí había una puerta, que bastaba con llamar, y que uno se encontraba en la presencia de Dios. Al fin, encontraron lo que buscaban; llamaron a la puerta y vieron, con el corazón palpitando a tope, cómo se abría, y cuando entraron... estaban en casa, en la celda de su convento. Entonces lo comprendieron: el lugar donde el cielo y la tierra se juntan se encuentra en esta tierra, en el lugar que Dios nos ha asignado". JÖRG ZINK


"Paseaba un alumno por una terraza con Confucio. Abajo, unos jóvenes danzarines ensayaban la coreografía para un nuevo ballet. Fíjate lo armónicos que son sus movimientos, dijo Confucio. A mí el baile me parece algo superficial –repuso el alumno–. ¿No sería mejor que los jóvenes pasaran su tiempo en meditación?. A lo que Confucio replicó: ¡Magnífica pregunta! Si creyéramos que solo hay un camino que conduce a la sabiduría, pronto nos cansaríamos y careceríamos de entusiasmo. Pero si recorremos diversos caminos, si meditamos, bailamos, cultivamos un jardín o pisamos la uva, entonces encontramos nuevas y distintas facetas en nosotros. Todo ello nos hace más fuertes, nos da aliento y nos ayuda a reaccionar si un día surgen obstáculos en nuestro camino. Entonces, esos obstáculos no nos perturbarán. WILLI HOFFSÜMMER

"Un erudito intelectual acudió a un rabí. Como había oído hablar muy bien de él, le expuso un deseo completamente personal y le dijo: Llevo estudiando teología muchos años y he leído un libro tras otro, pero hasta ahora nunca he encontrado a Dios. Respondió el rabí: Entonces, seguro que todavía no te has agachado lo suficiente.


"Rabí, hay algo que no entiendo: se acerca alguien a un pobre y se muestra amable y le ayuda en lo que puede. Pero llega a un rico y ni siquiera lo mira. ¿Qué pasa con el dinero?. Entonces dijo el rabí: Acércate a la ventana: ¿qué ves?.Contestó: Veo a una señora con un niño. Y un coche que va al mercado. «Bien. Ahora ponte delante del espejo. ¿Qué ves?». ¡Por Dios, rabí, qué voy a ver: a mí mismo!. «Pues ya ves: la ventana está hecha de cristal, y de cristal está hecho el espejo. Basta con poner un poco papel de plata detrás, y uno ya solo se ve a sí mismo». SIGMUND VON RADECKI.

lunes, 29 de marzo de 2021

DIOS QUIERE SER VIVIDO

¿Misticismo y corporalidad, espiritualidad y vida cotidiana, ¿acaso no se excluyen? 

"Todo lo contrario, se compenetran. En este contexto me gusta citar a Josef Beuys: El misterio tiene lugar en la estación del ferrocarril. Así es: Dios se manifiesta en la vida cotidiana, y en ningún otro sitio se le va a encontrar. El Maestro Eckhart ha expuesto esta verdad de forma muy plástica en su exégesis, tan singular, de la historia bíblica sobre María y Marta (sermón 28). No debería ser María, la que está sentada en arrobamiento a los pies de Jesús, el ejemplo a seguir sino Marta, que se afana y sirve a Jesús. Marta está más adelantada que María en el camino espiritual, conoce la experiencia mística que impregna su vida cotidiana mientras que María aún disfruta del gozo del éxtasis. María tiene que atravesar todavía su experiencia de iluminación para volver a la vida cotidiana. Es allí, en las cosas sencillas, donde se trata de experimentar la realidad divina. Dios no quiere ser adorado, sino vivido. Solo por este motivo hemos nacido como seres humanos: porque Dios quiere ser persona en nosotros".

Willigis Jager
La ola es el mar

sábado, 27 de marzo de 2021

DOMINGO DE RAMOS: CUANDO EL AMOR SE ENTREGA...

Domingo de Ramos, pórtico de la Semana Santa
Nuestros templos se colman de personas que siguiendo una antigua tradición, transmitida de generación en generación, quieren recibir las palmas, “el guano bendito”, se dice en Cuba. 

Para este domingo dos propuestas para nuestra reflexión:
1- “¡Perdónalos, Padre, porque no saben lo que hacen!”. Jesús dice esto sobre sus verdugos. Pero ¿Es verdad? Todo parece indicar que no eran precisamente inocentes. ¿Cómo es posible que los verdugos de Jesús, y también nosotros muchas veces, no sepamos lo que hacemos? La respuesta puede ser esta: No sabemos lo que hacemos porque no sabemos cuánto somos amados. Esa es la ceguera y la verdadera ignorancia de los verdugos. Criticamos, perseguimos y crucificamos a otros porque no nos sentimos queridos, aceptados y amados. Somos severos con los otros porque estamos urgentemente necesitados de amor, y al no saberlo nos sentimos débiles y frágiles y entonces nos endurecemos, pero de una manera absurda y falsa. La mayoría de nosotros no ha escuchado nunca en su corazón la voz de Dios diciendo: “Te amo”. Pocos hemos escuchado lo que Jesús junto al Jordán: “Tú eres mi hijo amado, en quien me complazco”. La verdad es que una inmensa mayoría no ha escuchado esto, ni de Dios, ni de otro ser humano. Esta es la fuente de la maldad del mundo. Por eso esa era la misión de Jesús: contarnos acerca del infinito e inmenso del Padre. Y así, “Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo”.
2- “Uno de ustedes me va a entregar”. Así dice Jesús en la Última Cena. Y vean la palabra ENTREGAR porque es muy importante. Porque eso es también lo que hace Dios, según Pablo: “…él, que no perdonó a su propio Hijo, sino que lo ENTREGÓ por todos nosotros”. (Romanos 8, 32). El momento en que Jesús es entregado es crucial en el ministerio de Jesús. Es pasar de la acción a la pasión. Después de años de enseñar, predicar, sanar y desplazarse hacia donde Él quisiera ir, Jesús es entregado al capricho de sus enemigos. Ya las cosas no son hechas por Él, sino a Él. Es flagelado, coronado de espinas, escupido, ridiculizado, desnudado, clavado desnudo, en una cruz. Es una víctima pasiva, sujeta a las acciones de los otros. Desde el momento en que Jesús es entregado, comienza su pasión y a través de esta pasión Él cumple con su vocación.

¿Qué aprendemos en este día de Jesús?:
1- Que lo más importante es el Amor. Esa es la razón para vivir, la meta de nuestra vida, la santidad a la que somos convocados por la fe. Amar y dejarse amar sigue siendo la tarea más importante de cada ser humano, y por eso el mensaje de Jesús sigue siendo hoy URGENTE. Mientras la gente no sea o no se sepa amada habrá crucificados.
2- Y a veces el crucificado puede convertirse en la mayor expresión de ese AMOR que necesitamos. Jesús cumple en plenitud su misión cuando, por amor, acepta que su vida sea, no acción, sino PASIÓN, dejarse hacer. La mayor parte de nuestra vida también es pasión También nosotros, cuando somos entregados, podemos encontrar la manera de anunciar como Jesús la BUENA NUEVA. Dice Jesús: “Ustedes no me quitan la vida, yo la doy”. Eso es ser cristiano.
Para este domingo en el que se juntan la gloria y el rechazo en la persona de Jesús, sintamos la urgencia de la falta de amor, amor verdadero, amor que se deja crucificar, y seamos de verdad discípulos de aquel que siempre nos amará primero. Amen.

Fray Manuel de Jesús, ocd

AMIGO DE LA VIDA

“Señor, tú siempre puedes utilizar tu poder. ¿Quién va a resistir la fuerza de tu brazo? El mundo entero es ante ti como un grano de arena en la balanza, como gota de rocío matutino que cae sobre la tierra. Pero tú te compadeces de todos, porque todo lo puedes, pasas por alto los pecados de los hombres, para que se arrepientan. Amas a todos los seres y no aborreces nada de lo que hiciste; pues si hubieras odiado alguna cosa, no la habrías creado. ¿Cómo subsistiría algo, si tú no lo quisieras? ¿Cómo se conservaría si no lo hubieras llamado? Pero tú eres indulgente con todas las cosas, porque son tuyas, Señor, amigo de la vida, pues tu aliento incorruptible está en todas ellas. Por eso corriges poco a poco a los que caen y los reprendes recordándoles sus pecados, para que se aparten del mal y vuelvan a ti, Señor” 

(Sabiduría 11, 22-12, 2).

viernes, 26 de marzo de 2021

HACIA UNA PRESENCIA MÁS PROFUNDA...

"Somos convocados a la presencia de Dios por el hecho de nuestro nacimiento, pero nos hacemos presentes a Dios sólo por nuestro consentimiento. A medida que se desarrollan y despliegan gradualmente nuestras facultades y capacidades de relacionarnos, crece la capacidad de entrar en relación con Dios y cada paso hacia una presencia más profunda requiere un nuevo consentimiento. Cada nuevo despertar a Dios cambia nuestra relación con nosotros mismos, con todos y con todo lo demás. El crecimiento en la fe es crecimiento en la percepción correcta de toda la realidad

(Thomas Keating, Intimidad con Dios).

 

jueves, 25 de marzo de 2021

LA VERDADERA CONTEMPLACIÓN PRODUCE UNA CONCIENCIA SOCIAL

  

"Al encontrar a Dios, Merton encontró todo el resto de la realidad y, especialmente a sus hermanos, hombres y mujeres. Los descubrió no como una masa sin rostro, sino como personas individuales, cada uno diferente y único a los ojos de Dios, todos unidos por una red de relaciones que los entrelazan encontrando cada uno su identidad y singularidad en Dios, que es para todos la causa oculta del amor. Lo que la personalidad humana significaba para Merton, también ha de significarlo para nosotros: el descubrimiento de nuestra unidad con nuestros hermanos y hermanas en Dios. Cuando llegamos a caer en la cuenta de nuestra dependencia de Dios y de la dependencia de toda realidad, experimentamos un sentido de interdependencia con todo el pueblo de Dios y la responsabilidad que tenemos hacia ese pueblo. La verdadera contemplación inevitablemente produce una conciencia social. Necesito, pues, extenderme más allá de los problemas morales que me conciernen como individuo y comprometerme en los asuntos sociales que enfrentan los hombres y mujeres de mis días y mi época. No puedo tener conciencia de Dios, si, al mismo tiempo, no tengo conciencia de mis hermanos y hermanas. Ellos como yo, están en Dios...".

William H. Shannon

"Silencio en llamas"

lunes, 22 de marzo de 2021

RAYOS DE LUZ Y DE FUEGO

 "Como una lupa concentra los rayos del sol en un pequeño punto de calor ardiente que puede quemar una hoja seca o un trozo de papel, así los misterios de Cristo en el Evangelio concentran los rayos de luz y de fuego de Dios en un punto que prende fuego en el espíritu del hombre. Para eso Cristo nació y vivió en el mundo y murió y volvió de la muerte y ascendió hasta Su Padre en el cielo...A través del cristal de Su Humanidad concentra los rayos de Su Espíritu Santo sobre nosotros para que sintamos la quemadura y toda experiencia mística se infunda en el alma a través del Hombre Cristo".

Thomas Merton, Semillas de contemplación

miércoles, 17 de marzo de 2021

VER Y TOCAR A DIOS EN TODO Y TODOS

 

"La verdadera santidad no consiste en tratar de vivir sin las criaturas. Consiste en usar las cosas buenas de la vida para hacer la voluntad de Dios. Consiste en usar la creación de Dios de tal modo que todo lo que tocamos y veamos y usemos y amemos dé nueva gloria a Dios. Ser un santo significa pasar por el mundo recogiendo frutos para el cielo en todos los árboles y cosechando la glorias de Dios en todos los campos. El santo es el que está en contacto con Dios de todos los modos posibles, en todas las direcciones posibles. Está unido con Dios en las profundidades de su propio ser. Ve y toca a Dios en todo y en todos los que le rodean. A donde quiera que va, el mundo vibra y resuena (aunque en silencio) con las profundas armonías puras de la gloria de Dios".

Thomas Merton, Tiempos de celebración

lunes, 15 de marzo de 2021

LA ENCENDIDA MEMORIA (nueva edición).

Este volumen analiza la vida y obra de Thomas Merton a partir de la relación entre los conceptos de soledad y sociedad desde una memoria iluminada. Se establecen correspondencias entre aspectos cruciales que se abordan dentro de las categorías amplias de soledad y sociedad desde la perspectiva de los estudios norteamericanos. La estructura monástica sería transformada en un proceso religioso dinámico, al igual que un tiempo de silencio habría de acompañar una necesidad de anunciar las buenas noticias halladas en el corazón de la contemplación y de denunciar los males de su tiempo. El crecimiento de Merton ilustra cómo iluminación y compasión acompañan indisociablemente el sendero de descenso al deshacer la caída de Adán. Se exploran las consecuencias éticas y políticas de una reconstrucción de la propia identidad con Cristo en su contexto estadounidense.

Autor: Fernando Beltrán Llavador
Publicación de la Universidad de Valencia
2020

miércoles, 10 de marzo de 2021

UNA VENTANA PARA VER A DIOS (Henri Nouwen habla de Thomas Merton)

"La única vez que me encontré con Thomas Merton me impresionó su actitud llana, propia de alguien con los pies bien puestos en la tierra. Durante un retiro en la Abadía de Getsemaní, dos estudiantes de la Universidad de Notre Dame que habían concertado un encuentro con Merton a orillas del lago me pidieron que me sumara al mismo. La conversación fue muy animada. Hablamos un poco sobre los abades, otro tanto sobre Camus, y todavía un poco más sobre la escritura. Tomamos cerveza, contemplamos el agua y dejamos transcurrir momentos de silencio; nada muy especial, profundo ni «espiritual». De hecho, fue un poco decepcionante. Probablemente hubiera esperado algo fuera de lo usual, algo que pudiera comentar con otras personas o que pudiera contar cuando escribiera a casa. Sin embargo, Thomas Merton se comportó como un ser humano cabal, sano, alguien que no estaba dispuesto a actuar para satisfacer nuestra curiosidad. Era uno más entre nosotros.

Más tarde, cuando estudié los libros de Merton y pude impartir un curso sobre su vida y sus escritos y escribir una pequeña introducción a su pensamiento, agradecí mucho ese encuentro que no había tenido nada de espectacular. Me di cuenta de que cada vez que me sentía tentado a dejarme llevar por ideas sublimes o aspiraciones etéreas, me bastaba con acordarme de aquella tarde para volver a pisar tierra. Siempre que traía de nuevo a mi mente la imagen de aquel hombre sencillo, de vaqueros gastados, abierto, expansivo, risueño, amistoso y natural, me daba cuenta de que Merton no fue y no es sino una ventana a través de la cual quizás podamos captar un atisbo de Aquel que le había llamado a una vida de oración y soledad. Cualquier intento de ponerlo en un pedestal no solo le horrorizaría sino que está en las antípodas de lo que Merton representaba. El mismo Merton lo expresó de forma inequívoca cuando, después de veinte años de vida monacal, escribió: «Mi monasterio… es un lugar en el que desaparezco del mundo como un objeto de interés a fin de estar en todas partes por medio del ocultamiento y la compasión» (Prefacio a la edición japonesa de La Montaña de los Siete Círculos). 


Volver a hacer de Merton un objeto de interés sería como usurparle póstumamente su vocación. Pertenecía a la esencia de su vocación dejar morir a su «interesado e interesante» viejo yo para recibir un nuevo yo que se halla oculto en Dios".

Henri Nouwen
(Fragmento de su prólogo a El Palacio del Vacío de Thomas Merton, de James Finley)

VISIÓN CONTEMPLATIVA

"Mientras la espiritualidad devocional insiste principalmente en términos de conducta, la espiritualidad contemplativa, sin descuidar la necesidad de ese cambio, recalca la necesidad del cambio de conciencia. No basta con portarse mejor; necesitamos llegar a ver la realidad de un modo diferente...

No basta con saber lo que significa contemplación y oración de conciencia; necesitamos saber también a dónde nos conducen. La respuesta es sencilla: nos conducen a todos nuestros hermanos y hermanas. La vida de Thomas Merton nos puede servir de ejemplo. En 1941 entró a la abadía de Getsemaní, con la irrevocable determinación de abandonar el mundo. Fue a buscar a Dios y solamente a Dios. Y, con el correr del tiempo, encontró que su búsqueda de Dios lo conducía inevitablemente hacia las personas... Por supuesto esta es la sencilla lógica de una visión contemplativa de la realidad. Pues, si yo soy uno con Dios, también lo son mis hermanos y mis hermanas. El contemplativo encuentra la causa del amor en toda la realidad. Esto es lo que Merton quiere decir, cuando afirma que la contemplación es un despertar a lo real dentro de todo lo real.

Esta experiencia no dualística de Dios, experiencia de Dios como realmente distinto del mundo, pero no separado de él, es lo que más adelante conducirá a Merton a darse cuenta de que abandonar el mundo es en el mejor caso una parábola, y en el peor una ilusión. Al encontrar a Dios, Merton encontró todo el resto de la realidad, y especialmente a sus hermanos, hombres y mujeres".

William H. Shannon 
"Silencio en llamas"

jueves, 4 de marzo de 2021

SIN CONTEMPLACIÓN NO PODEMOS COMPRENDER...

“La contemplación sola no construye un nuevo mundo. La contemplación sola no da de comer al hambriento, no viste al desnudo, no educa al ignorante, ni devuelve al desdichado pecador la paz, la verdad y la unión con Dios. Pero, sin contemplación no tenemos la perspectiva para ver lo que hacemos en nuestro apostolado. Sin contemplación no podemos comprender el íntimo significado del mundo en el cual tenemos que actuar. Sin contemplación, permanecemos pequeños, limitados, divididos, parciales: nos aferramos a lo insuficiente, permanecemos unidos a nuestro limitado grupo y a sus intereses, perdemos de vista la justicia y la caridad universal, nos dejamos llevar por las pasiones de la acción y, finalmente, traicionamos a Cristo.”...

Thomas Merton

lunes, 1 de marzo de 2021

TRASCENDER TODA DIVISIÓN

 

En 1956, mientras los negros en Montgomery boicoteaban la discriminación en los autobuses, y el nombre de Martín Luther King, Jr. empezaba a figurar en los titulares de los periódicos, Merton estaba leyendo a Gandhi. Este interés ya le venía de antes, de cuando estudiaba en Oakham, aunque ahora había algo más de por medio que figurar en una posición radical entre los estudiantes de su clase. Se trataba, en parte, de un proceso de análisis de las implicaciones sociales del evangelio así como de uno de los primeros pasos de conexión con contemplativos no cristianos.

 Esa primavera marcó el comienzo de la inmersión de Merton en la literatura y escritos religiosos rusos. A ratos fue interesante; ese otoño se lanzó el primer Sputnik; pero lo que los rusos podían ofrecerle a Merton no eran los viajes espaciales sino una profunda tradición espiritual. Llegó al convencimiento de que la restauración de la unidad en la Iglesia comenzaba con la recuperación de la unidad en uno mismo.

"Si queremos poner junto lo que está dividido, no podemos hacerlo mediante la imposición de una división sobre otra. Si hacemos esto, la unión ya no es cristiana. Es una unión política y condenada a posteriores conflictos. Debemos contener todos los mundos divididos en nosotros y trascenderlos en Cristo".


Explorando los escritores rusos, Merton fue de los primeros occidentales que leyeron la novela de Boris Pasternak, Doctor Zhivago. Sorprendido por los chocantes y genuinos elementos cristianos que marcaron los escritos de Pasternak, Merton le escribió en agosto de 1958, dos meses antes de que el Comité de los Nobeles anunciara que el premio Nobel le había sido concedido a Pasternak.

 Merton le dijo a Pasternak que estaba pensando en estudiar ruso "a fin de intentar adentrarse en la literatura rusa en sus textos originales..., preferiría más leerle a usted en ruso".

Jim Forest

"Thomas Merton. Vivir con Sabiduría"

(PPC)

Ser parte de todo...

¡Oh Dios! Somos uno contigo. Tú nos has hecho uno contigo. Tú nos has enseñado que si permanecemos abiertos unos a otros Tú moras en nosotros. Ayúdanos a mantener esta apertura y a luchar por ella con todo nuestro corazón. Ayúdanos a comprender que no puede haber entendimiento mutuo si hay rechazo. ¡Oh Dios! Aceptándonos unos a otros de todo corazón, plenamente, totalmente, te aceptamos a Ti y te damos gracias, te adoramos y te amamos con todo nuestro ser, nuestro espíritu está enraizado en tu Espíritu. Llénanos, pues, de amor y únenos en el amor conforme seguimos nuestros propios caminos, unidos en este único Espíritu que te hace presente en el mundo, y que te hace testigo de la suprema realidad que es el amor. El amor vence siempre. El amor es victorioso. AMÉN.
-Thomas Merton-

Santidad es descubrir quién soy...

“Es cierto decir que para mí la santidad consiste en ser yo mismo y para ti la santidad consiste en ser tú mismo y que, en último término, tu santidad nunca será la mía, y la mía nunca será la tuya, salvo en el comunismo de la caridad y la gracia. Para mí ser santo significa ser yo mismo. Por lo tanto el problema de la santidad y la salvación es en realidad el problema de descubrir quién soy yo y de encontrar mi yo verdadero… Dios nos deja en libertad de ser lo que nos parezca. Podemos ser nosotros mismos o no, según nos plazca. Pero el problema es este: puesto que Dios solo posee el secreto de mi identidad, únicamente él puede hacerme quien soy o, mejor, únicamente Él puede hacerme quien yo querré ser cuando por fin empiece plenamente a ser. Las semillas plantadas en mi libertad en cada momento, por la voluntad de Dios son las semillas de mi propia identidad, mi propia realidad, mi propia felicidad, mi propia santidad” (Semillas de contemplación).

LA DANZA GENERAL.

"Lo que es serio para los hombres a menudo no tiene importancia a los ojos de Dios.Lo que en Dios puede parecernos un juego es quizás lo que El toma más seriamente.Dios juega en el jardin de la creación, y, si dejamos de lado nuestras obsesionessobre lo que consideramos el significado de todo, podemos escuchar el llamado de Diosy seguirlo en su misteriosa Danza Cósmica.No tenemos que ir muy lejos para escuchar los ecos de esa danza.Cuando estamos solos en una noche estrellada; cuando por casualidad vemos a los pajaros que en otoño bajan sobre un bosque de nísperos para descansar y comer; cuando vemos a los niños en el momento en que son realmente niños; cuando conocemos al amor en nuestros corazones; o cuando, como el poeta japonés Basho, oímos a una vieja ranachapotear en una solitaria laguna; en esas ocasiones, el despertar, la inversiónde todos los valores, la "novedad", el vacío y la pureza de visión que los hace tan evidentes nos dan un eco de la danza cosmica.Porque el mundo y el tiempo son la danza del Señor en el vacío. El silencio de las esferas es la música de un festín de bodas. Mientras más insistimos en entender mal los fenómenos de la vida, más nos envolvemos en tristeza, absurdo y desesperación. Pero eso no importa, porque ninguna desesperación nuestra puede alterar la realidad de las cosas, o manchar la alegría de la danza cósmica que está siempre allí. Es más, estamos en medio de ella, y ella está en medio de nosotros, latiendo en nuestra propia sangre, lo queramos o no".
Thomas Merton.

ORACIÓN DE CONFIANZA...

“Señor Dios mío, no tengo idea de hacia dónde voy. No conozco el camino que hay ante mí. No tengo seguridad de dónde termina. No me conozco realmente, y el hecho de que piense que cumplo tu voluntad, no significa que realmente lo haga. Pero creo que el deseo de agradarte te agrada realmente. Y espero tener este deseo en todo lo que estoy haciendo. Espero no hacer nunca nada aparte de tal deseo. Y sé que si hago esto, tú me llevarás por el camino recto, aunque yo no lo conozca. Por lo tanto, siempre confiaré en ti aunque parezca perdido y a la sombra de la muerte. No temeré, pues tú estás siempre conmigo y no me dejarás que haga frente solo a mis peligros

Para intercambiar comentarios sobre Thomas Merton y otros maestros contemporaneos del espíritu.