"La auténtica experiencia de Dios no la hace el hombre, sino que es Dios quien la hace a través nuestro. Con palabras de Xavier Zubiri, uno de los filósofos contemporáneos que más radicalmente ha pensado la relación constitutiva del ser humano con Dios, "no es que el hombre tenga experiencia de Dios, sino que el hombre es experiencia de Dios". Dicho de otro modo, "el hombre es la manera finita de ser Dios".
Ya nos lo dijo Jesús, pero nos escandalizamos y no le creemos, como le sucedió a sus contemporáneos: "¿No está escrito en vuestra Ley: Sois dioses?" (Jn 10,34). Nos espanta ser "dioses", porque asociamos divinidad con máximo de poder. Tememos el poder porque no tenemos el corazón puro. Pero Dios no es poder, sino capacidad, capacidad infinita de creación y donación que, en Cristo Jesús, se nos ha manifestado como el máximo despojo. A esa plenitud es a la que somos invitados. Ahí está Él, expuesto, desarmado, abierto a todos, despojado de todo, esperando, alentando e indicando el camino de esta plena experiencia de Dios que Él realizó en nombre de todos".
Xavier Melloni, sj.
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