Para intercambiar comentarios sobre Thomas Merton y otros maestros contemporaneos del espíritu.
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lunes, 9 de febrero de 2009
Amanecer.
Ser parte de todo...
-Thomas Merton-
Santidad es descubrir quién soy...
“Es cierto decir que para mí la santidad consiste en ser yo mismo y para ti la santidad consiste en ser tú mismo y que, en último término, tu santidad nunca será la mía, y la mía nunca será la tuya, salvo en el comunismo de la caridad y la gracia. Para mí ser santo significa ser yo mismo. Por lo tanto el problema de la santidad y la salvación es en realidad el problema de descubrir quién soy yo y de encontrar mi yo verdadero… Dios nos deja en libertad de ser lo que nos parezca. Podemos ser nosotros mismos o no, según nos plazca. Pero el problema es este: puesto que Dios solo posee el secreto de mi identidad, únicamente él puede hacerme quien soy o, mejor, únicamente Él puede hacerme quien yo querré ser cuando por fin empiece plenamente a ser. Las semillas plantadas en mi libertad en cada momento, por la voluntad de Dios son las semillas de mi propia identidad, mi propia realidad, mi propia felicidad, mi propia santidad” (Semillas de contemplación).
LA DANZA GENERAL.
Thomas Merton.
ORACIÓN DE CONFIANZA...
“Señor Dios mío, no tengo idea de hacia dónde voy. No conozco el camino que hay ante mí. No tengo seguridad de dónde termina. No me conozco realmente, y el hecho de que piense que cumplo tu voluntad, no significa que realmente lo haga. Pero creo que el deseo de agradarte te agrada realmente. Y espero tener este deseo en todo lo que estoy haciendo. Espero no hacer nunca nada aparte de tal deseo. Y sé que si hago esto, tú me llevarás por el camino recto, aunque yo no lo conozca. Por lo tanto, siempre confiaré en ti aunque parezca perdido y a la sombra de la muerte. No temeré, pues tú estás siempre conmigo y no me dejarás que haga frente solo a mis peligros
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3 comentarios:
Quien ve el amanecer como la maravillosa promesa de un nuevo día, es una persona que posee la mayor de las riquezas, una riqueza que no se contabiliza en precio, pero tiene un valor infinito. Posee la riqueza de la felicidad.
Sin embargo, quien ve en el amanecer la dolorosa anticipación de otro día vivido en la fría rutina mecánica de su soledad íntima, es digno de lástima. ¿Cuántos pobres hombres habrá detrás de máscaras y posesiones?... Pronuncian y viven el vacio sin sentido de su falsedad, de su autoengaño.
Como dice Eduardo Galeano, en este poema:
“Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no tienen tiempo para perder el tiempo.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que son siempre muchos y están siempre solos.
Pobres,
lo que se dice pobres,
son los que no saben que son pobres.”
Hoy estamos rezando por Eluana, esa mujer que ha suscitado polémica en los últimos días y hasta la intervención del gobierno italiano y la iglesia. Creo que ya está en paz. Me pregunto por qué no se defiende la vida de los que mueren de hambre en las calles o los parados o los perseguidos con ese mismo empeño.
El sábado pasado se cumplió el centenario del nacimiento de Dom Helder Camara, que murió hace diez años. En estos días he leído bastantes artículos que le hacen homenaje, y quiero dejar en este blog alguna reflexión suya, la de un hombre bueno, que no se quedó en palabras, sino que hizo de su vida acción y práctica de esas palabras, volvió fértil el desierto.
Estas son algunas de sus palabras:
«Que nadie se haga falsas ilusiones, que nadie obre de manera ingenua: quien escucha la voz de Dios y hace su opción interior, sale de sí mismo y parte para luchar pacíficamente por un mundo más justo y más humano, no piense que va a encontrar un camino fácil, pétalos de rosa bajo sus pies, multitudes escuchándole, aplausos por todas partes y, permanentemente, como protección decisiva, la Mano de Dios. Quien se arranca de sí y parte como peregrino de la Justicia y de la Paz, prepárese para enfrentar desiertos».
«No debemos quedarnos en las palabras. El progreso humano, la campaña contra las causas de las injusticias, la conquista de la dignidad, son la manera más directa como los hombres pueden cooperar a su propia redención y salvación, causas por las cuales Jesús dio su vida».
«Si doy comida a un pobre, me llaman santo, pero si pregunto por qué es pobre, me llaman comunista».
«Los jóvenes siempre tienen sus antenas conectadas y saben muy bien como captar las señales del amor apasionado y apasionante de Dios. Por qué hablar siempre de ‘práctica religiosa’ y jamás de ‘práctica evangélica’, hecha de amor y de valor siempre al servicio de los demás? Todo parece indicar que tal práctica no ha sido abandonada. Muy al contrario, la veo en plena acción por dondequiera que pase. Si los jóvenes van menos a la iglesia, tal vez sea porque en ella no encuentran adecuadamente reunidas la Vida y el Evangelio».
Gracias Dom Helder Camara.
También rezo por Eluana, y también me hago muchas preguntas...
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